"Los ecoesquemas pueden ser un apoyo en la mejora de la sanidad vegetal, pero no garantía de la misma" - Clara Aguilera

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Clara Aguilera

La señalítica de las nuevas políticas europeas en materia de sanidad vegetal marca el camino hacia lo que se considera una Europa "más verde".

La eurodiputada socialista Clara Aguilera explica en la siguiente entrevista cuáles podrían ser sus implicaciones, así como los aspectos que deberían ser tenidos en cuenta en la toma de decisiones.

PREGUNTA.- ¿Qué implicaciones cree pueden tener para el futuro de la sanidad vegetal los planteamientos recogidos en las estrategias "De la granja a la mesa" y de "Biodiversidad 2030"?

RESPUESTA.- Para revertir la pérdida de biodiversidad y garantizar una producción alimentaria sostenible, ambas estrategias abogan por un cambio en los métodos de producción, situando en primera línea unos objetivos de reducción de productos fitosanitarios que no hacen más que ampliar los retos que ya afronta la sanidad vegetal, tras años de supresión de distintas sustancias activas.  
Bien es cierto que se trata de objetivos políticos. La cifra a tener en cuenta será la que surja tras los correspondientes estudios de impacto y deberá estar basada en evidencias científicas. Dicho esto, en la búsqueda de métodos alternativos y seguros está el futuro de la sanidad vegetal. El reto es el de disponer de esas alternativas a tiempo para no bajar en ningún momento el nivel de la protección de las cosechas de plagas y enfermedades.

P.- Para que la estrategia contribuya realmente a mejorar las deficiencias del sistema en materia de sanidad vegetal, ¿cuáles son los aspectos que, en su opinión, deberían regularse?

R.- El éxito de la estrategia radica en la capacidad de obtener alternativas sostenibles eficaces y seguras para reducir la dependencia de pesticidas y fertilizantes. Para ello, debe apoyarse en la I+D para obtener productos de base biológica y no cerrar la puerta a las nuevas técnicas disponibles, como la edición genética, que posibiliten los estándares de sostenibilidad que queremos alcanzar en Europa. Las acciones legislativas que enumera el Anexo de la Estrategia deberán sustentarse en sólidos criterios científicos para lograr el equilibrio entre sostenibilidad y una fitosanidad adecuada.

P.- Al hilo, la nueva PAC introduce como novedad los denominados ecoesquemas, ¿cuál es su finalidad y qué repercusión puede para la sanidad vegetal europea?

R.- En la llamada arquitectura verde de la PAC, la línea de base son los requisitos obligatorios de buenas prácticas, o condicionalidad de las ayudas. Los eco esquemas pondrán a disposición de los agricultores toda una serie de prácticas beneficiosas para el medio ambiente y la lucha contra el cambio climático. Serán voluntarios para el agricultor que, en caso de aplicarlos, recibirá una ayuda complementaria. Su objetivo es recompensar a quien se compromete a más, en lugar de exigirlo. Sin duda podrán influir en la reducción de plaguicidas químicos si pensamos en un ecoesquema que propusiera una rotación de cultivos de cuatro años, por ejemplo. Pueden ser un apoyo en la mejora de la sanidad vegetal, pero no garantía de la misma.

P.- Para concluir, ¿hacia dónde cree que debe caminar la sanidad vegetal?

R.- La sanidad vegetal deberá seguir protegiendo el territorio europeo de la introducción y propagación de plagas, pero con una búsqueda constante de alternativas a los plaguicidas químicos. Métodos alternativos que deberán ser seguros y eficaces. Para ello será necesario la I+D y abrir las puertas a las posibilidades que ofrece la bioeconomía. Podremos avanzar hacia la sostenibilidad si no nos privamos de todos los avances tecnológicos a nuestro alcance que países terceros ya utilizan.