"Con el proyecto AgBio queremos demostrar que un ecosistema agrario biodiverso con un suelo vivo es más sostenible y rentable"

Sostenibilidad
Proyecto AgBio, Suelo vivo es más sostenible y rentable

Syngenta, pionera en inversión en proyectos de extensión de la biodiversidad en entornos agrarios, presentó hace unas semanas su nuevo –y ambicioso- proyecto de sostenibilidad, que trata de mostrar cómo la mejora de la biodiversidad puede impulsar en último término la rentabilidad en la agricultura. Se llama AgBio, y su versión piloto arranca de manera paralela en España, Argentina y Chile.

Conozcamos más de la mano del responsable de Sostenibilidad de Syngenta, Luis Miranda:

Pregunta.- ¿Qué principal objetivo se ha marcado Syngenta con la puesta en marcha del proyecto AgBio?

Respuesta.- Con el proyecto AgBio se pretende dar una visión más holística de la agricultura, entendida como una actividad sostenible e imprescindible para el ser humano. Queremos descubrir qué nos aporta la biodiversidad demostrando que un ecosistema agrario biodiverso con un suelo vivo es más sostenible y rentable. Se trata de dar una visión de la importancia de un ecosistema como es el agrario en conjunto donde existen múltiples relaciones que apenas conocemos, como por ejemplo cómo se interrelaciona la microbiota del suelo con el cultivo y su influencia sobre plagas y enfermedades.
 

P.- Salta a la vista que estamos ante un proyecto muy ambicioso por parte de la compañía. ¿Qué importancia le conceden desde Syngenta a la retroalimentación entre agricultura y biodiversidad?

La biodiversidad que contribuye a equilibrar esos ecosistemas agrícolas, que nos va a permitir satisfacer la demanda global de
alimentos de manera sostenible

R.- Es obvio que necesitamos un modelo de desarrollo agrario sostenible, máxime con la creciente población mundial; esto hace que el reto sea producir alimentos en cantidad suficiente y de manera segura y saludable para el consumidor. Esta producción de alimentos se ve afectada año tras año por plagas y enfermedades, que destruyen hasta el 40% de las producciones agrícolas, por lo que la sanidad vegetal como herramienta es fundamental para conseguir alimentar a toda la población; pero eso no debe suponer un deterioro del medio ambiente y la biodiversidad: es más, hemos encontrado un aliado en la biodiversidad que contribuye a equilibrar esos ecosistemas agrícolas, que nos va a permitir satisfacer la demanda global de alimentos de manera sostenible.
 

P.- Ha mencionado en alguna ocasión la importancia del equilibrio plaga-depredador. ¿Por qué es un indicador a tener en cuenta?


R.- Cuando hablamos de biodiversidad agrícola nos referimos a todos los seres vivos que podemos encontrar en nuestro entorno, vertebrados, invertebrados, bacterias, hongos, etc. todos ellos juegan un papel importante en el ecosistema agrícola, y una de esas funciones es ayudar a “mantener a raya” a determinadas especies que llegan a convertirse en plagas debido a su crecimiento explosivo en nuestros cultivos. Si mantenemos un hábitat propicio en el entorno de nuestras parcelas agrícolas favorecemos la presencia de especies muy importantes por su función de control sobre otras: todos conocemos como las mariquitas depredan pulgones. Este tipo de relaciones entre especies son muy numerosas y apenas conocemos una pequeña parte. En este sentido, el proyecto AgBio nos va a ayudar a conocer que biodiversidad hay en nuestro cultivo y sus interrelaciones, y cómo contribuye a que los programas de protección vegetal del cultivo sean más efectivos.
 

P.- También se ha referido a la polinización, en el caso de los frutales.


AgBio nos va a ayudar a conocer que biodiversidad hay en nuestro cultivo y sus interrelaciones.

R.- Otro de los aspectos importantes que nos aporta la biodiversidad es la polinización. Sabemos que el 70% de los cultivos dependen de los polinizadores para producir fruto, por lo que es fundamental que sepamos manejar los cultivos favoreciendo la presencia de polinizadores. Medidas sencillas como la implantación de márgenes de flores en las parcelas agrícolas son capaces de atraer multitud de especies de polinizadores (abejas solitarias, mariposas, escarabajos, moscas, etc.) que van a ayudar a polinizar nuestros cultivos.

Nos hemos fijado dentro del proyecto AgBio en los frutales de hueso porque tienen una gran dependencia de los polinizadores para fecundar sus flores y dar fruto. En este sentido, queremos demostrar la importancia de los polinizadores silvestres frente al uso de colmenas de Apis mellifera o Bombus terrestres, pues su acción mejora el cuajado del fruto, su tamaño y calidad e, incluso, tiene un efecto positivo en la biodiversidad.
 

P.- Háblenos de las particularidades de AgBio. ¿En cuántas fincas y localidades se ha iniciado el proyecto piloto y en qué consisten los ensayos de campo?


R.- En este momento España es uno de los países piloto a nivel mundial. Hemos comenzado con cultivos leñosos como son los frutales de hueso, donde tenemos tres campos de ensayo en melocotones, nectarinas y ciruelas en las provincias de Murcia y de Zaragoza, y el olivar, también con tres campos de ensayo repartidos por toda la geografía nacional (Granada, Toledo y Zaragoza).
 

AgBio

P.- ¿Por qué se eligieron olivares y frutales de hueso para iniciar los ensayos? ¿El planteamiento es trasladable a otros cultivos? ¿Está previsto hacerlo?

Al implantar cubiertas verdes y áreas florales aumentamos la presencia de insectos beneficiosos, que van a ejercer un control sobre determinadas plagas.

R.- Es cierto que el olivar no es un cultivo que necesite la ayuda de los polinizadores para el cuajado de las aceitunas, pero sí que se ve muy beneficiado por la mejora de la biodiversidad. Al implantar cubiertas verdes y áreas florales aumentamos la presencia de insectos beneficiosos, que van a ejercer un control sobre determinadas plagas; un ejemplo claro es el incremento de poblaciones de Crisopa, insecto depredador de la polilla del olivo (Prays oleae) de una de las principales plagas del olivar.

En el caso de los frutales, además de esa función de los insectos depredadores de plagas, tenemos el valor añadido de la polinización que ya comentamos anteriormente.

Ambos cultivos se van a ver beneficiados por la mejora de la calidad del suelo generada por la presencia de cobertura vegetal dentro del cultivo que va a potenciar una mejor microbiota (microorganismos que habitan el suelo, como las bacterias, hongos, protozoos) y macrobiota (invertebrados) favoreciendo la descomposición de la materia orgánica y formando un suelo rico en nutrientes para el desarrollo de los cultivos.
El proyecto AgBio ha comenzado con estos dos cultivos en España por ser de importancia económica y donde los beneficios de la biodiversidad son claramente demostrables, pero por supuesto este modelo es extrapolable a todos los cultivos, que van a ser beneficiados por este cambio de paradigma en agricultura.
 

La idea arrancó en tres países –España, Argentina y Chile- pero la aspiración de Syngenta es abrirla al mundo. ¿En qué fase del proyecto nos encontramos en la actualidad?

La experiencia alcanzada al trabajar 11 años con OP nos ha permitido poner en marcha de forma más rápida y eficaz el proyecto AgBio

R.- Estamos en una fase inicial del proyecto. Actualmente, estamos definiendo qué aspectos de la biodiversidad son más relevantes para los cultivos, cómo influyen elementos como la calidad y salud del suelo y el agua en la agricultura, y ver cómo podemos actuar para mejorar la agricultura en general. Una vez alcanzados los objetivos de esta fase piloto, la idea es universalizar este conocimiento y estas prácticas sostenibles.
 

Un aspecto muy importante de AgBio es que cuenta con la supervisión de universidades y centros de investigación españoles. ¿Alimenta este tipo de colaboraciones las probabilidades de éxito?


R.- Evidentemente, las colaboraciones externas de universidades y centros de investigación son fundamentales para alcanzar los objetivos. Contamos con grupos con experiencia en materia de insectos, suelo o microbiota, entre otros, y su respaldo en el diseño de los estudios científicos ha sido crucial. Si a eso le sumamos a la larga experiencia de Syngenta como empresa referente en innovación agrícola, tanto en mejora vegetal como en protección de cultivos, auguran el éxito de esta iniciativa puntera en el sector.
 

P.- ¿En qué medida entronca este proyecto con el programa de Syngenta ‘Operación Polinizador’?


R.- Podemos decir que Operación Polinizador (OP), centrado en los polinizadores silvestres, es la génesis de este proyecto. La experiencia alcanzada al trabajar 11 años con OP nos ha permitido poner en marcha de forma más rápida y eficaz el proyecto AgBio. Sin embargo, AgBio va mucho más allá gracias a esa visión global de la agricultura que aporta. AgBio estudia todos los insectos del ecosistema, el suelo, la microbiota, procesos como la nitrificación, el secuestro del carbono, la infiltración, la erosión, etc., además de las múltiples relaciones entre todos los elementos del ecosistema agrícola y cómo influyen finalmente todos estos procesos en la producción del cultivo.