Acelerando la innovación en la lucha frente a la Tuta Absoluta
La Tuta absoluta es un lepidóptero originario de Sudamérica perteneciente a la familia Gelechiidae. Considerada una de las plagas más importantes del tomate, su alto potencial reproductivo unido a su ciclo biológico hacen de la tuta una de las plagas más peligrosas del tomate, pudiéndose desarrollar hasta 12 generaciones entre 29 y 38 días sin parada invernal.
Ataca en cualquier estado de desarrollo del tomate y sus infestaciones pueden llegar a destruir todo el cultivo si el grado de infestación es severo. La hembra efectúa su puesta sobre la parte aérea de la planta, especialmente en el envés de las hojas de forma aislada, pero también se puede encontrar en otros órganos de la planta.
La larvas pueden penetrar tanto en frutos como en hojas y tallos de los que se alimenta, creando perforaciones y galerías (minas). La minas son irregulares y se necrosan afectando al desarrollo de la planta.
Como control preventivo:
- Mantener las naves de cultivo totalmente limpias de restos de plantaciones anteriores y de hierbas, y cerradas, durante un periodo mínimo de 6 semanas, antes de realizar un nuevo trasplante.
- Solarización o colocación de plástico (mínimo 2 semanas) para control de las pupas existentes en el suelo.
- Verificar los cerramientos, sellando todos los posibles huecos, por muy pequeños que parezcan, por donde pueden penetrar los adultos de Tuta.
- Colocación de trampas adhesivas: unos 8-12 días antes de plantar, deben quedar colocadas las placas o bandas adhesivas, a las que pueden añadirse difusores de la feromona sexual de Tuta, a razón 20-30 difusores por hectárea.
- Colocación trampas de agua para captura masiva de Tuta: entre 30 y 40 trampas/ha, al menos, los primeros 3 a 5 meses desde el trasplante. Las trampas deben quedar colocadas sobre la 3ª-4ª semana después del transplante. Conviene Reponer los difusores cada 5-6 semanas en épocas muy calurosas y cada 8-9 en las más frías. También se recomienda instalar 2 trampas delta indicadoras de Tuta que se contarán semanalmente.
- Tratamientos iniciales a las bandejas con Abamectina en el caso de riesgo de puesta de Tuta o Spinosad si se detectan larvas.
- En las plantaciones de agosto a septiembre, el control con Nesidiocoris tenuis, especialmente con suelta en semilleros, es una herramienta muy efectiva para el control sostenible de la plaga.
COSTAR® es un insecticida selectivo biológico que actúa por ingestión sobre las larvas de los primeros estadios de desarrollo. Especialmente indicado para su empleo en programas de lucha integrada y biológica, está constituido por esporas y cristales proteicos de Bacillus thuringiensis (Berliner), var. Kurstaki (cepa SA-12) [WG] que contienen toxinas activas para el control de Tuta y otros lepidópteros.
Esta nueva cepa bacteriana presenta una mayor potencia insecticida gracias a la alta concentración de cristales proteicos (Cry1AC) a una menor dosis de aplicación. El reducido tamaño de sus partículas y su formulado en forma de granulado dispersable permite una mayor estabilidad de almacenamiento, una mejor disolución y un reparto más homogéneo en el cultivo, ofreciendo un mayor control de la plaga sensible.
Esta nueva cepa bacteriana presenta una mayor potencia insecticida gracias a la alta concentración de cristales proteicos (Cry1A) a una menor dosis de aplicación. El reducido tamaño de sus partículas y su formulado en forma de granulado dispersable permite, una mejor disolución y un reparto más homogéneo en el cultivo, ofreciendo un mayor control de la plaga objetivo. Este formulado garantiza la estabilidad del producto al menos durante 2 años.